Un simple dolor de muela

Hace bastantes años tuve un dolor de muela, después de ir al dentista, éste me dijo que tenía que hacer endodoncia y el costo era elevado, al menos para mi que en aquel entonces no tenía los recursos que tengo hoy en día, recuerdo que en esa operación terminé gastando los únicos ahorros que tenía. Por aquellos años mis ingresos económicos eran realmente mínimos pero ya al menos ya tenía la noción de lo que era ahorrar pero nunca imaginé toparme con esa situación hasta que sucedió, fue un trago amargo por lo anterior que menciono pero pude solucionarlo, a pesar que tuve la oportunidad de pedir dinero a mis papás pero decidí no hacerlo, un tanto por orgullo y otro tanto para demostrarme a mi mismo que podía enfrentar tal cosa y pues bueno, llegó a buen fin aquello.

Después de haber experimentado ese problema, supe que tenía no solo de recuperarme económicamente sino ser más previsor y ahorrar un poco mas, y efectivamente así fue y así ha sido, y es que en cualquier momento puede ocurrir algo adverso de lo que necesitemos recurrir al dinero, agraciada o desgraciadamente, como lo quieras ver, puede suceder.

Hoy en día, que tengo un trabajo mas o menos estable, que mis ingresos han aumentado demasiado, en comparación a aquellos años en los que representaban "mucho" para mi, hoy

Perdiendo el control.

Había un sujeto que por cuestión de trabajo y profesión tenía que llevar una agenda bien organizada, donde debía anotar con detalle la tarea a realizar y la hora, como lo hacen muchas personas, nada fuera de lo normal. El detalle es que esa persona era sumamente ansiosa ante cualquier cosa que tuviese que hacerse e implicara "sentarse y esperar" a que ese momento llegara, por ejemplo, tener que hacer un escrito para presentarse dentro de dos semanas, lo hacía de inmediato, o bien, si debía esperar una respuesta dentro de una semana, llamaba antes, o bien, si algo debía hacerse a su auto que no implicara nada grave ni urgente como reemplazar un limpiador del parabrisas, cubrir un rayón, iba enseguida a buscar la solución, en fin, era una persona que "comía" ansias pues todo lo que implicara hacerse y por lo que habría que esperar, ¡debía hacerse ya!, ¡al instante! o que llegará ese momento, y así se desempeñaba en su trabajo o en su vida personal, siempre queriendo que las cosas sucedieran en un abrir y cerrar de ojos, y se mortificaba por eso, aunado al deseo de querer vivir en su oficina, le encantaba, deseaba que después del viernes fuera

40, su PRRA madre...

 ...dijo Pooh!...Y es que parece que fue hace poco tiempo, cumplía mi primera, segunda y tercera década. Como si en cada respiración uno cumpliera un año mas de vida, pero bueno, hasta este momento no he encontrado una máquina que detenga el tiempo.

He escrito algunas entradas que por título tiene la cantidad de años que cumplo y en esta no es la excepción de tratar de recordar mis cumpleaños hace, al menos, mas de 2 décadas y los sitúo en ese tiempo porque era una etapa en las que aun mis cumpleaños eran de hacer una fiesta en casa, con familiares, amigos y vecinos. La típica fiesta con piñata, bolos, regalos, pastel y demás, que empezaba como a las 5:30 de la tarde y se acababa "tarde" (a las 10 aproximadamente). Me cuesta trabajo recordar todos esos años y lo más que recuerdo son vagos extractos incluido el de la vez que me cayó un jarro en la cabeza al momento de romperse la piñata y aventarme a recoger los dulces, acción que me hizo desistir para poder sobarme, y que por pura casualidad quedó impresa en una foto que aun recuerdo. Una bonita agridulce anécdota que le cuento a todos y que a esta fecha me sigue causando gracia.

Colores

He escuchado preguntar a algunas personas "¿porque no todos quieren o aman de la misma forma?" y posiblemente la respuesta más rápida es que cada persona es diferente y cada una quiere o ama a su manera. Pero algunos no logran comprender y creo que se basan en lo que tradicionalmente implica querer o amar y la manera de verlo con los ojos, y no tener la capacidad de "verlo" por otros medios. Me puse a pensar sobre eso y quiero poner la situación con el siguiente ejemplo:

Si te pregunto ¿qué color te gusta mas, el blanco o el negro? y tu me respondes que blanco, yo te diré que a mi me gusta el negro y, ¿eso implica que sea incompatible contigo?. En un principio si pues a ambos nos gustan colores diferentes pero no por ello significa que no podamos convivir. El color blanco resalta sobre el negro y viceversa, el color blanco se ve de noche, el color negro de día, si ambos colores se combinan el resultado será un tono gris cuya tonalidad dependerá de la intensidad de uno u otro, entonces la manera de ver las cosas ha cambiado pues a ambos nos gustan colores diferentes pero a ambos nos gusta un color, que es el origen.

Tic...toc...el contador ha sido reiniciado

Ha iniciado un nuevo año y el contador vuelve estar en cero, lo que para muchos representa el inicio de nuevas oportunidades, retos y metas, un contador que inicia en cero, anunciando el comienzo de un día mas, un año mas...

Muchas personas esperan a que termine el año para empezar un nuevo proyecto, una tarea, un trabajo, etc. o simplemente cerrar ciclos, dar por terminado algo, cortar de tajo algo que cree innecesario llevarlo al próximo año aun cuando representa una imposibilidad, pero eso es decisión de cada uno de nosotros.

Un distintivo de todo esto es que la mayoría de las personas celebran al doble, por un lado que se termina un año, posiblemente lleno de problemas, angustias, decepciones, etc. o que termina un año lleno de trabajo, bendiciones y mas, y por otro lado, el inicio de un nuevo año que están viviendo, junto con todo lo bueno que les dio el anterior, otros 365 días que posiblemente disfruten. Pero lo importante de todo ello es que no se pierda la costumbre de festejar, ya sea con la familia, con los amigos, con conocidos o incluso solo, pero hacerlo y