martes, 6 de septiembre de 2022

Perdiendo el control.


Había un sujeto que por cuestión de trabajo y profesión tenía que llevar una agenda bien organizada, donde debía anotar con detalle la tarea a realizar y la hora, como lo hacen muchas personas, nada fuera de lo normal. El detalle es que esa persona era sumamente ansiosa ante cualquier cosa que tuviese que hacerse e implicara "sentarse y esperar" a que ese momento llegara, por ejemplo, tener que hacer un escrito para presentarse dentro de dos semanas, lo hacía de inmediato, o bien, si debía esperar una respuesta dentro de una semana, llamaba antes, o bien, si algo debía hacerse a su auto que no implicara nada grave ni urgente como reemplazar un limpiador del parabrisas, cubrir un rayón, iba enseguida a buscar la solución, en fin, era una persona que "comía" ansias pues todo lo que implicara hacerse y por lo que habría que esperar, ¡debía hacerse ya!, ¡al instante! o que llegará ese momento, y así se desempeñaba en su trabajo o en su vida personal, siempre queriendo que las cosas sucedieran en un abrir y cerrar de ojos, y se mortificaba por eso, aunado al deseo de querer vivir en su oficina, le encantaba, deseaba que después del viernes fuera lunes para volver a ella, incluso cuando llegaba a su casa seguía hablando de cuestiones de trabajo, y si había algún trabajo que implicara cierta urgencia, lo llevaba a su casa para seguir ahí, aunque dicho trabajo bien pudiera esperar al día siguiente para continuarlo, no, el quería hacerlo de inmediato, ya, al instante, su ansiedad era tanta que la llevaba al extremo, y muchas veces no podía ni siquiera dormir, por estar esperando a que ese algo por lo que esperaba sucediera de una buena vez, para ansiar el próximo momento, y así sucesivamente.

Un día, estando ya casi de noche en el escritorio de su oficina y estar pensando en todo el tiempo que debía esperar para sus asuntos, incluso aunque fueran de un día para otro, alguien tocó a la puerta, el sujeto se levantó de su silla y fue a ver quien era, era una persona extraña que pidió pasar pues llevaba un paquete para él, él desconcertado, pues no esperaba nada ni nadie, abrió la puerta y lo hizo pasar a su privado, el extraño le dijo que tenía en sus manos la solución a su problema, el sujeto le preguntó que a que problemas se refería, el extraño le dijo que a su problema de ansiedad extrema que padecía, el sujeto quedó aun mas desconcertado y antes de que pudiera hablar, el extraño saco de entre sus ropas un artilugio parecido a un control pequeño de televisión, el cual solo tenía dos botones, uno con el símbolo de teléfono y otro con el símbolo de "adelantar", el extraño le dijo, este pequeño control te ayudará bastante, el sujeto recobró el habla y le preguntó ¿de que forma?, el extraño le dijo "esto que ves aquí, sirve para adelantar las cosas que quieras que pasen ya, si tienes una cita la próxima semana, aprietas el botón y tu cita será cuestión de minutos, si quieres que uno de tus pendientes que tienes dentro de un mes sea mañana, haces lo mismo, así funciona", el sujeto quedó intrigado y preguntó "cual es el truco?", el extraño le dijo "no hay ningún truco, podemos hacer la prueba con algo que tengas pendiente", el sujeto le dijo "quedaron de enviarme un correo mañana, en el cual me harían llegar una información que pedí a un cliente", el extraño preguntó a que hora debía ser eso, el sujeto le dijo que a las doce del mediodía, el extraño apretó el botón y lo detuvo exactamente a mediodía, le pidió al sujeto revisar su correo y efectivamente el sujeto corroboro que el correo había llegado, el sujeto le dijo "tiene que ser una broma, aquí está el correo que pedí", el extraño le dijo "no es ninguna broma", el sujeto aun estaba asombrado cuando notó que la ventana que daba hacía afuera estaba completamente iluminada, se asomó y era la luz del sol, el sujeto estaba seguro que hace un par de minutos era de noche pero lo dudo un poco ya que pasar de noche a día en minutos, implicaba sentir cansancio, tener hambre o ciertas necesidades que acontecen en cierto tiempo, el sujeto dijo "estoy seguro que hace un instante era de noche y ya es de día", el extraño le dijo "completamente seguro que hace un par de minutos era de noche y ahora es de día", el sujeto dijo "o sea, que la noche se volvió día o como es que ha pasado", el extraño le respondió al mismo tiempo que levantaba el control y lo movía ligeramente de un lado a otro "aquí tienes la respuesta", el sujeto recordó el artefacto y preguntó "¿entonces con eso puedes manipular el tiempo?", el extraño respondió "si lo quieres llamar así, pero si, puedes adelantar el tiempo para hacer lo que acabas de ver hace un momento", el sujeto se sintió muy feliz y dijo "entonces podré jugar con el tiempo cuando yo quiera", el extraño respondió "mas que jugar es para que adelantes las cosas que quieras, tengan lugar ya, no puedes retroceder el tiempo ni pausarlo y debes tener cuidado ya que si tienes un acontecimiento que tenga lugar mañana y por error lo adelantas a otro que tenga lugar dentro de una semana, el primero habrá pasado ya y no puedes volver a él", el sujeto dijo "parece sencillo, lo único que tengo que hacer es guiarme por mi agenda, anotar todo y así iré paso a paso, pero...", hizo una pausa, se quedo pensativo, continuó "¿pero que hay de todo lo demás, o sea, las personas, el día..?, y antes de finalizar, el extraño respondió "sé a lo que te refieres, si adelantar las cosas implica que solo tu seas el 'afectado' por decirlo de alguna manera", el sujeto dijo "si, a eso me refiero, ¿que sucede?, el extraño respondió "nada en absoluto, el adelantar tus cosas no implica un desfase de tiempo, los demás no notarán el cambio, para ellos todo será normal, habrá transcurrido su tiempo de manera normal, no notarán que el día se hizo noche en cuestión de segundos, tu serás el único que sabrá que sucede, incluso si tu le platicas a alguien de este aparato, lo más probable es que no te crea, aun cuando hagas la prueba delante de él de adelantar el tiempo y quererle mostrar que transcurrió una hora en si acaso 10 segundos, esa persona creerá que ha pasado una hora luego de 60 minutos, así que no te preocupes por eso, no hay ningún problema", el sujeto preguntó "y que hay con el sueño, la comida, las necesidades, el baño, la vestimenta...", el extraño volvió a interrumpirlo "aahh, eso, tampoco hay problema ya que tus necesidades quedaran cubiertas como si en realidad lo hubieras hecho, si adelantas el tiempo en una hora en donde deberías haber comido, en realidad lo hiciste aunque hayas hecho un salto de tiempo, igual con el sueño, ahorita no tienes ningún síntoma de sueño, verdad?", haciendo la alusión al brinco que se hizo de pasar de noche a pleno día, el sujeto dijo "tienes razón" y aun mas feliz le dio las gracias al momento en que el extraño le extendió el brazo junto con el aparato y le dijo "ten, tómalo", el sujeto lo tomo, sabiendo que era la solución a la terrible ansiedad, inconsciente, que tenía, vio el aparatito, lo vio una y otra vez por un lado, por el otro, queriendo ponerlo a prueba pero lo que lo detuvo fue el hecho que había otro botón con un símbolo en forma de aviso y confundido le preguntó al extraño cual era la función de ese botón, el extraño le dijo "ese botón es para mandarme llamar", el sujeto, aun mas desconcertado le preguntó "hablarte, para asistencia, para que vengas, ¿para que si todo lo que me has dicho esta perfectamente entendible y además es fácil de usar?, el extraño le dijo "independiente que sea muy sencillo y fácil de utilizar, algún día podrías mandarme llamar", el sujeto le dijo "no sé en que caso pudiera necesitarte pero esta bien, por todo lo demás no hay problema", el extraño le preguntó "alguna otra cosa?", el sujeto, junto con su felicidad solo atinó a darle las gracias, extasiado por el aparato, comiendo ansias por usarlo, el extraño se levantó de su asiento y dijo que se tenía que ir, el sujeto de nueva cuenta le dio las gracias pero preguntó que cuando se lo devolvería, el extraño respondió que no se preocupara por eso, que algún día volvería, el sujeto no prestó tanto interés en eso, suponía que no sería ni en una semana, ni en un mes, incluso ni en un año, tanto que podía adelantar con ese control lo tenía cegado, vaya error...

Al acompañar al extraño a la puerta de salida, el sujeto volvió a su privado, acariciando el control, pensando qué hacer con el aunque de antemano ya sabía lo suficiente y lo más importante, podía adelantar el tiempo para que todos sus eventos agendados tuvieran lugar en algunos minutos en lugar de días o semanas o bien las cuestiones personales que tuviese planeadas o tener que hacer. Casi al instante se puso a revisar su agenda y a estar seguro de tener en ella todos sus eventos perfectamente anotados. Ya era de día, así que hasta eso fue meticuloso a la hora de hacer apuntes, una vez hecho, ponía a prueba ese artefacto...

Lo primero que tenía apuntado en la agenda era la cita con un cliente para dentro de 2 horas, presionó el botón del control y la desconocida magia proveniente del aparato hizo lo suyo pues al instante, si acaso en unos cuantos segundos, dos horas habían transcurrido y el cliente llegó a la cita programada, el dueño del aparato le preguntó que porque había llegado antes y el cliente solo atinó a decir que era la hora en que habían acordado, el sujeto del control vio en su agenda la hora, vio su reloj, y efectivamente era el tiempo correcto a pesar que haber transcurrido unos segundos, en fin...ese sujeto toda la semana estuvo usando el control a su antojo y de verdad estaba maravillado porque todo marchaba sobre ruedas, todo sucedía al instante pero ahora su ansiedad era poder usar el aparato para el próximo momento futuro, suprimía sus momentos de comida y descanso, claro, usando el control, con el único fin de usarlo para que esos momentos futuros fueran ya, al instante. Su ansiedad no terminó con el aparato pues incluso unas vacaciones que debía tener con su familia, fuera de la ciudad, el sujeto fue capaz de utilizar el control para "saltárselas" y poder continuar en el punto en el que debía estar haciendo labores de oficina, aclarando que su familia ni siquiera lo noto, para ellos, las vacaciones sucedieron normalmente, en el tiempo y lugar indicado, fotos, recreo, comidas y todo lo que implica salir de vacaciones. Al sujeto no le importó, ya que si el quisiese, podría adelantar el tiempo para otras futuras vacaciones y "compensar" las anteriores.

Ese sujeto creyó haber encontrado "algo" que lo ponía "feliz" aunque en realidad nunca lo estuviera pues, como dije antes, su ansiedad ahora se reflejaba en estar pensando en usar el control una próxima vez, para luego usarlo una próxima vez, para luego usarlo una próxima vez...su ansiedad no le permitía ver mas allá del famoso control. Él era "feliz" pudiendo llegar a esos momentos futuros una y otra vez, a su antojo, sin preocupaciones ni demás, y el tiempo se prolongo bastantes años adelante...

Un día, como cualquier otro, esa persona tenía un pendiente dentro de una semana, y como de costumbre, en su oficina, la ansiedad hizo que quisiera usar el control, presiono el botón adecuado para ello y, también como de costumbre, esperó que el artefacto hiciera su trabajo solo que en esta ocasión nada sucedió, el hombre pensó que no había presionado el botón y volvió a hacerlo, el resultado fue el mismo pues nada pasó, contrariado, creyó que el control empezaba a fallar, por lo que creía era necesario presionar el botón con más fuerza y lo hizo, pero el resultado fue el mismo, absolutamente nada pasó, y fue el mismo resultado después de casi hundir el botón con la máxima fuerza ejercida por el dedo, también luego de darle golpecitos suaves y cada vez mas fuertes hasta el punto de sujetar el control y casi para lanzarlo con fuerza al piso, pensó "como soy tonto, no puedo darme el lujo de estropearlo mas de lo que pudiera estar, si lo arrojo al piso se romperá y saldrá peor", el sujeto recordó que el control tenía un botón de asistencia así que lo oprimió pensando que el extraño que le dio el control recibiría el llamado y acudiría, lo cual pasó al cabo de un par de minutos el extraño llamó a la puerta de la oficina, dejando asombrado al sujeto la rapidez con la que llegó pero al menos sonrió un poco, alegrándose de que el extraño le ayudara a solucionar el problema con el control por lo que hizo pasar al extraño, el cual se sentó y le dijo le dijera la razón de haberlo llamado, el hombre el contó acerca del problema que lo estaba aquejando, le dijo que durante muchos años nunca tuvo problema alguno pero que ahora, que quería adelantar el tiempo para llegar a un evento que quería, que tendría lugar, naturalmente, en una semana, no era posible, el control no funcionaba, no obedecía, estaba descompuesto o algo mas, el extraño le dijo que ese control nunca deja de funcionar, siempre obedece, nunca se descompone, ni jamás tiene falla alguna, la razón por la cual ese control no ejecutaba la acción para lo cual fue hecho es porque el portador del mismo ya no existía para la fecha que necesitaba adelantar, el hombre no entendió del todo lo que quiso decir el extraño y le pidió repetir de nuevo, a lo que el extraño le dijo que el control no podía adelantar tiempos, fechas o momentos, para cuando su portador ya hubiera dejado de existir, el hombre trago saliva y dudoso le preguntó que a que se refería con dejar de existir, a lo que el extraño le contesto fríamente que para la fecha que él quería adelantar, él ya no existiría, el hombre se puso nervioso, empezó a sudar un poco, y tratando de "adivinar" lo que el extraño había dicho, le dijo "quieres decir que dentro de una semana ya no existiré?, no entiendo, estas tratando de decirme que en una semana moriré?", el extraño le dijo "no precisamente dejaras de existir en una semana, puede ser esta noche, puede ser mañana, dentro de dos días", el hombre, helado, temblando de miedo, viendo a todo y a nada a la vez, solo atino a preguntar "pero, como es eso posible?, sigo sin entender", el extraño respondió "es normal, todos dejan de existir algún día", el hombre dijo "pero no es posible, es demasiado pronto, no han pasado mas que un par de años y ahora todo termina, me quedan tantas cosas por hacer, muchas cosas que disfrutar, que vivir, debe haber un error, que fue lo que paso?", el extraño le dijo "Has vivido tu tiempo como has querido, la única diferencia es que lo has adelantado con el control que tienes en tus manos, el tiempo para los demás ha sido como el que normalmente hubieras vivido de no haber usado el control como lo hiciste, persiguiendo esa ansiedad que siempre te caracterizó y la única manera en que terminará es que tu dejarás de existir, adelantaste tu tiempo, repito, con ese control que tienes", el hombre en un ataque de ira le recriminó "tu nunca me dijiste eso, porque?", el extraño respondió "nunca preguntaste, además, cuando vine, tu estabas envuelto en una supuesta felicidad por ese objeto, aparte, que te hacía pensar que el tiempo adelantado no contaba como normalmente debe transcurrir?", el hombre, envuelto entre lagrimas e ira, le dijo "tu me engañaste, nunca me dijiste", el extraño respondió "Yo no engaño a nadie, todos los que han tenido ese control han tenido la misma reacción, creen que ese control les da el poder de ciertas cosas, pero nunca piensan en lo que dejan de hacer, por hacer lo, dentro de su ansiedad, quieren que pase", el hombre, tratando de pensar las cosas solo se atrevió a decir algo como "pero, y mi familia? muy apenas los vi, muy apenas los disfrute, tenía ganas de salir de viaje con ellos, de platicar, de seguirlos viendo, de tomar unas copas, de ir por un helado, de...de...tantas cosas" y se sentó a llorar cabizbajo, el extraño, inmutado, le dijo "entiendo a que te refieres, sabes que dejaras de existir y ahora quieres recuperar el tiempo que nunca hiciste lo que se supone deberías haber hecho antes de llegar a este punto, de estar con ellos, de salir con ellos, de sonreír con ellos, de platicar con ellos...pero...que puedo decirte, lo mismo, todos han dicho exactamente lo mismo, dejaste de hacer cosas, por hacer otras que creías te daban la felicidad, cuando solo eran un balsamo para una enfermedad incurable, apostaste a eso, perdiste, el precio fue demasiado alto, lo estás pagando", el extraño, mientras el sujeto lloraba desconsoladamente, le quitó el control de la mano, se despidió y se fue, no sin antes voltearlo a ver por ultima vez, sin tristeza, sin remordimiento, sin ninguna expresión de por medio, regresó la mirada y salió. El hombre, llorando desconsoladamente, pensando en lo que había hecho, todo lo que hizo...para nada.

El sujeto levantó la cabeza, vio entre la ventana el atardecer y recordó las palabras del extraño, que su ansiedad había hecho hacer cosas a cambio de hacer otras como pasar su tiempo con una de las cosas más importantes para alguien, su familia, una que había vivido su tiempo normalmente, mientras él había vivido una que según él le traía "la felicidad", una falsa felicidad pero al fin esa era su creencia. Se dio cuenta que su capricho le costó no la vida en si, sino haber dejado vivir buenos momentos con su familia, haber estado ahí, compartiendo con ellos, yendo a lugares con ellos y compartir muchas cosas en familia...algo que solo podía hacer, posiblemente, ya solo un par de días. Y el sujeto, ya dentro de su tristeza y el poco razonamiento que le quedaba, agacho la cabeza. Lo peor es que cada minuto fue un tormento para él, al no saber cuando moriría, y el poco tiempo que le quedó, tampoco pudo disfrutarlo.

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