martes, 14 de abril de 2009

No soy Dios, pero...


Me doy cuenta que tengo un gran poder al igual que las demás personas, algunas también se han dado cuenta, otras no, unas mas ni siquiera lo saben, otras lo desperdician y unas cuantas lo usan para hacer el mal.

Al igual que muchas yo no sabía que lo tenía y si lo sabia no lo utilizaba simplemente porque NO me daba la gana pero muchas personas y acontecimientos me han hecho cambiar y hacer con ese poder algo bueno.

No soy un superhéroe ni tampoco son un Dios y sin embargo hay algo en mi que puede hacer muchas cosas buenas por los demás.

No sabía que con una visita a personas de edad avanzada éstos se sintieran contentos y olvidar por un momento su edad, sus penas, su abandono.

No sabía que con una llamada la persona que la recibe sintiera que tiene a alguien en quien confiar, en quien apoyarse, con quien platicar sabiendo que será oído.

No sabía que con unas palabras de aliento pudiera generar una tranquilidad en la persona que las recibe.

No sabía que con una visita a un niño enfermo éste sonriera y fuera feliz al menos por unos minutos, olvidando por un momento su enfermedad, como si no existiese.

No sabía que con una sonrisa pudiera contagiar a otra persona.

No sabía que con un “buenos días” pudiera cambiarle el humor a una persona.

No sabía que dar un consejo pudiera realizar cambios en otras personas.

No sabía que tender la mano a alguien pudiera generarle tener confianza en los demás.

No sabía que con un chiste pudiera hacer olvidar los malos momentos que en ocasiones pasan otras personas.

No sabía que con mi opinión una persona pudiera ver en otra dirección.

No sabía que ser sencillo pudiera darles una lección a otras personas.

No sabía que ser sincero hiciera ver la realidad a otros.

No sabía que convivir con otro ser vivo éste se sintiera contento.

No sabía que juguetear con un niño éste fuera feliz por un momento.

No sabía que con un abrazo pudiera otra persona sentirse aliviada de sus penas.

Y tantas cosas más que no lo sabía…Hoy lo sé. Sé que no soy millonario, no soy una celebridad, no soy una persona que ande en el medio social y tampoco soy Dios pero tengo un gran poder, al lado de otros podría parecer pequeñito pero el poder de la voluntad manifestado en cualquier grado no deja de ser bueno.

Hagamos algo pequeño pero que a otra persona le parezca lo más grande que jamás le han hecho o que ha recibido. Una sonrisa, un abrazo, un saludo cordial, una llamada, un “buenos días”, un “que te vaya mejor”, un “hasta luego” en lugar de un “adiós”, una visita y más. No soy Dios pero puedo generar buenos momentos, y tú?.

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